24 de enero de 2018

Empapelar muebles de formica o melanina

Una de las preguntas habituales que solemos recibir es acerca de la posibilidad de empapelar antiguos muebles de fórmica o melanina para darles una segunda vida y actualizarlos.
Se trata de una gran solución para darle un nuevo toque a la decoración de nuestro hogar y mucho más barata que cambiar de muebles.

La respuesta es sí, se puede empapelar muebles laminados o de fórmica, pero hay que seguir ciertos pasos para garantizar que el resultado sea perfecto.



1. Necesitas una imprimación adecuada. Al ser superficies no porosas, es necesario aplicarles una imprimación. Por ejemplo, la imprimación multiadherente de Monto tiene la ventaja de que es al agua y puedes aplicarla tanto al plástico o PVC, madera y metal.
2. El adhesivo será una cola metyl celulósica y dependiendo del soporte (o base) del papel, la aplicaremos a la superficie y al papel o solo a la superficie (en caso de que sea soporte tejido no tejido).
3. Utiliza las siguientes herramientas para poner el papel pintado: cinta de pintor, lápiz, metro, regla, mini rodillo (para aplicar la cola) y cúter.



Como comentábamos, antes de poner el papel pintado sobre el mueble, tendremos que aplicar la imprimación, por lo que es necesario para que adhiera que limpiemos bien toda la superficie donde queremos colocar el papel.
Las partes que queramos proteger de la imprimación, como herrajes o zonas doradas, deberemos taparlas con cinta de pintor.
Posteriormente, aplicaremos la imprimación extendiéndola bien con el rodillo.
Una vez imprimado todo el mueble, lo dejamos secar el tiempo de secado que indique el fabricante, antes de colocar el papel pintado.


Este tipo de imprimación suele funcionar bien, pero si no se ha abierto poro en la superficie, también es posible lijarla.
Mientras seca la imprimación, podemos ir preparando la cola para empapelar, respetando las indicaciones del fabricante.


Una vez seco y con la cola preparada, procedemos a colocar el papel pintado sobre la superficie, cortando el papel en la medida necesaria y aplicando la cola a la superficie (si es tejido no tejido) o a la superficie y al papel (si no es tejido no tejido).
Pon el papel sobre la superficie encolada y rectifica lo necesario hasta colocarlo en la posición que decidas. Ayúdate de un trapo para colocarlo y hacer presión desde el centro a los bordes. Así llevarás el exceso de cola a los bordes y evitarás burbujas de aire.


La cola sobrante puedes retirarla suavemente con otro paño húmedo o esponja.
Una vez retirada la cola sobrante y pasados unos minutos, pasa un rodillo tapajuntas por las esquinas y los cantos de los muebles. El resultado será perfecto.


Os dejamos varios ejemplos. Esperamos que os animéis a utilizar nuestro producto para restaurar vuestros muebles. Podéis visitar nuestra web www.disbar.info